Así será la Piñata versión 2.0 cuando se vaya Daniel Ortega (viva el Canal Interoceánico)

Así será la Piñata versión 2.0 cuando se vaya Daniel Ortega (viva el Canal Interoceánico)

Ha sido un día movido hoy en Nicaragua. Daniel «El Masacrador de niños» Ortega negó la entrada a la comisión de la OEA que llegaba a darle la última oportunidad de defenderse, después de tantos reportes oficiales de la OEA y de la ONU que lo pintan como un tirano. Supongo que ahí no hace falta más masa para esa lora.

Luego supimos que el primo Félix Maradiaga volvía a Nicaragua, más o menos al ride con esa delegación de la OEA. Al saber que no había entrada para los cheles, Felix hizo lo que yo no haría, igual llegar a Nicaragua a tantear si Masacrín amaneció de malcriado. Llevo unas horas viendo los videos de su llegada y al parecer, por hoy, no lo van a echar preso en las mazmorras del reino batracio. Pero como toda Nicaragua sabe, mañana será otro día.

Menciono rápidamente las noticias del día porque el artículo de hoy no será de esos temas coyunturales. Hoy voy a profundizar sobre un tema que tengo rato de no oír hablar y que sigue siendo importante para los que viven en Nicaragua y quieren tener un tuquito de tierra. Solo 6 millones de personas.

¿Se acuerdan de la Ley 840?

La Ley 840 es como aquellas leyes viejas de la Piñata, pero multiplicado por mil. Bajo la excusa de construir un Canal Inter-oceánico (ya casi lo empiezan a hacer, ahora sí, en serio), Masacrín regaló el derecho a Juan Jing de piñatearse lo que quisiera. Augusto Calderón hubiera estado super orgulloso del violador de menores que ahora le administra su nombre. Sobre todo porque a diferencia de las leyes de la piñata, ahora a los que iban a dejar en la calle, era a los campesinos.

Así fue que nació el Movimiento Campesino Anticanal …

Lucha Campesina anti Canal

Todo esto fue antes de abril 2018. Cuando Masacrín era asesino, pero cayetano. El Movimiento Campesino hizo «unas cuantas» marchas en contra de la Ley 840:

EXCLUSIVA CON MEDARDO MAIRENA

¿Ustedes creen que sin el Movimiento Campesino hubieras tenido la insurrección de abril del año pasado? Yo tampoco.

Entonces mejor que no haya Canal

Como dije en el artículo de hace un mes ¿Puede Daniel Ortega hacer el gran Canal inter-oceánico en Nicaragua (todavía)? Esta es la aclaración definitiva, las probabilidades de haber un Canal en Nicaragua son tan mínimas, como la esperanza de la Vieja Arrimada de ser presidenta.

Las condiciones socio-políticas han mermado en gran medida la imagen del país y su capacidad de inspirar confianza en los capitales de inversión que podrían financiar este proyecto. Indicador tras indicador confirman que Nicaragua es un país camino a la ruina económica y ningún inversionista estará dispuesto a correr ese riesgo. Sobre todo porque la garantía de legalidad (y legitimidad) que puede dar un gobierno como el de Ortega en las actuales circunstancias es, en el mejor de los casos, débil.

Pero existe una posibilidad que se haga el canal ¿No?

No. Ninguna. O bueno, para Daniel “El Masacrador de niños” Ortega no la hay. Aunque corra al hijo parásito bueno para nada que lo embarcó con Juan Jing y ponga a Bayardo Arce a conseguir inversionistas. O que se arregle con el COSEP, AMCHAM y todo el sector privado de Nicaragua. Ni así.

Aunque le quiten todas las sanciones. Aunque libere a todos los presos políticos que todavía tiene en la Modelo. Aunque eche preso a todos los paramilitares que mataron y torturaron ciudadanos nicaragüenses (siguiendo sus ordenes). Aunque devuelva todas las tierras que “la revolución” le está repartiendo ahorita a sus tomatierras.

Aunque pase todo eso y además celebre elecciones libres, transparentes, con cero fraude. Si él gana, ese canal está tan muerto como la conciencia de la vieja arrimada. Aquí no estoy exagerando, o dejando que mis pasiones nublen la razón. Objetivamente hablando, Daniel Ortega no puede hacer un canal inter-oceánico.

Uff! Todo bien pues, no habrá Canal

¡Ay muchacho! Si la supuesta construcción del Canal nunca fue lo verdaderamente problemático (de largo se veía que estos inútiles ni el primer hoyo iban a hacer). Es la Ley 840 el clavo y esa sigue vigente. Masacrín de vez en cuando emociona a los batracios hablando del Canal, no porque quiera empezar (ahora sí, sin falta), más bien es para mantener viva la Ley.

Porque si la Piñata del 90 es un indicativo de cómo van a salir los sandinistas del poder esta segunda vez, hay que prepararse para recibir un país quebrado, saqueado y totalmente desvalijado. No se asusten si este mismo año, Daniel Ortega comienza a prometer «tierras productivas» a todos los que voten por él en el 2021. De por sí, en el campo él siempre ha sido débil, «regalando» fincas tal vez saca un poquito más, suficiente para robarse menos votos. Y de paso deja en la calle a campesinos como don Medardo y doña Chica. Es lo que los sandinistas llaman win-win.

No creo tío Bacanalnica, que sean tan descarados

¿No crees que el violador, asesino, ladrón de Daniel Ortega sea tan descarado de robarse miles de tierras a campesinos que le han hecho la vida imposible desde hace 5 años y que en abril del año pasado casi lo dejan sin reino batracio con los tranques? ¿En serio?

Así que olvidate si queres del derecho que tienen los campesinos de trabajar las tierras que heredaron. Olvidate también de todas las marchas que hizo el Movimiento antes de abril. Incluso, olvidate de los tranques y los muertos que todavía hoy en día siguen poniendo los campesinos para que Nicaragua sea libre.

Ponele mente a una cosa nada más. En Venezuela están pasando hambre, de verdad hambre, porque los compañeros socialistas dejaron morir la producción en el campo. En los 80, en la Nicaragua sandinista, estábamos igual o más quebrados que ellos, pero gracias a nuestros campesinos, esa hambre no la conocimos. Podría ser diferente esta vez.

Esa Ley urge que sea derogada.

*Foto de arriba cortesía de Carlos Herrera/Confidencial.