¿A Nicaragua la carcome el resentimiento?

¿A Nicaragua la carcome el resentimiento?

Cuando hablamos de cambios en Nicaragua, no solo estamos hablando de sacar a Daniel «El Masacrador de niños» Ortega del poder. Hablamos de personas, actitudes y cosas más profundas.

El primo Beto se lanzó toda una monografia sobre el tema, así que hoy que no se trabaja en Bacanalnica, puedo aprovechar para compartirla con ustedes. Recuerden dejar sus comentarios abajo, que el primo fijo los lee.

El resentimiento social, carcoma de Nicaragua

Por Beto Liondeux

Es con cierto desasosiego que me atrevo a decir que el mal más grande que aplaca a Nicaragua, no son las guerras ni los desastres naturales, es el resentimiento social de las personas. ¿Alguna vez has conocido alguien a quien le compartes un éxito, y te salen con un comentario burdo con el cual espuman toda su vergüenza y envidia por que en el fondo añoran lograr lo que tu hiciste? No estás solo.

En Nicaragua abundan esas aves de mal agüero, esos Rey Midas a la inversa, que todo lo que tocan se vuelve…lodo, pongámosle así para sonar más profesional. Estas personas viven la vida de manera cíclica, son fatalistas, conformistas, y no toleran que otros logren cosas o tengan una mejor educación que ellos.

En cierta ocasión, hablando con mi arrendador acerca del valor de la educación, el, así como enjuagándose la boca y más inflado que un pavo real con esteroides, me dijo que sus hijos habían estudiado en USA. Para tratar de crear una conexión con él, de alguna manera, le expresé que yo también había recibido mi educación en aquella nación potencia. Como si le hubieran puesto un tizón encendido, se levantó y me dejó hablando sólo excusado que iba tarde a una cita.

Si pensas que este ejemplo es trivial e infantil, bueno, pongámonos un poco mas serios. Nicaragua está plagado de gente resentida social. Gente que no tolera que uno sea audaz, atrevido, bien vestido, elocuente, con modales, con postura, con dinero, y con una familia ejemplar. Nos gusta el morbo, ver el sufrimiento, palparlo, si es posible, devorarlo y digerir el sufrimiento ajeno. Y lo más escalofriante es que este nivel de morbosidad comienza desde el liderazgo político de Nicaragua.

Los lideres sandinistas que han mantenido este país en cautividad son bien conocidos por ser tipos intolerantes, desfachatados, burdos, y energúmenos a la N potencia que no se les puede contradecir o hablar mal de ellos, por que llegan al punto de ofrecerte pistola o cárcel por ello. No podés ser mejor que ellos, por que existe el recelo, el deseo de minimizarte, de pulverizarte, y todo por que tus esfuerzos y sacrificios en la vida te han llevado a ser años luz mejor que ellos. Ellos han hecho un excelente trabajo en permear esto en la sociedad, más en los vulnerables, los pobres. Por lo que ahora vivimos en un universo cóncavo y convexo, polarizado, donde el pobre se ensaña con el que tiene mayores posibilidades porque lo vinculan con corrupción o por tener una vida fácil. No es siempre es el caso.

Esto es lo que se llama una cosmovisión fatalista, donde yo soy pobre por que mis padres y mis abuelos eran pobres, soy pobre porque el tal imperio succiona la médula de nuestros recursos, soy pobre por que el tal oligarca me explota. Es una visión cíclica de la vida, cuando debería verse como un proceso linear.

Si la gente resentida social viera la vida de manera linear, entendería mejor el contexto de la sociedad, y por que hay unos que tienen mas que otros.  La vida como un proceso linear es que cada minuto es una oportunidad para cambiarlo todo. La pobreza mental es lo que impide el desarrollo y la transformación de generación en generación. La vida no es un ciclo de condenación, es un avance continuo, un proceso linear donde cada persona en todos los estratos, tiene el potencial de hacer algo para mejorar la calidad de vida de sus familias.

Cuando en Nicaragua comencemos a ser mas acuciosos y comprensivos de como funciona este proceso linear, y dejemos de ser resentidos sociales y acomplejados, vamos a ver una luz que destellará en nuestra nación como nunca antes, y cada día vamos hacer que esa luz brille hasta el día siguiente, y así sucesivamente.

En Suiza, hay una costumbre de que, al llegar a un edificio, la gente se parquea en los lotes mas alejados del edificio por concientizarse por algún prójimo que tenga dificultades de caminar largas distancias. Esto es tan normal para ellos como el respirar. Por que existe una cosmovisión transformacional, que produce frutos, desarrollo, y comprensión de las clases, y más importante, aplicación de principios morales.

En Nicaragua vemos la extrema disonancia que existen entre la supuesta oposición, es como la Torre de Babel, todos hablan un idioma diferente y jalan para todos lados, a sus propios intereses.

Tenemos que acabar con esta epidemia, esta peste, esta vida cíclica que parece tenernos condenados al tercer mundo. El cambio es ahora, en este minuto que acaba de pasar, comenzar a reflexionar, a abrazar nuevas ideas, a respetar mas a los demás, a absorber buenas practicas de otros, a buscar asociaciones, ampliar red de contactos, a socializar, a globalizar, a mejorar la calidad de vida de nuestras familias, y dejar atrás a ese enemigo, ese león que con sus colmillos rae nuestras carnes: el resentimiento social colectivo, carcoma de Nicaragua.