La mosca electorera (otra filtración exclusiva desde El Carmen)

La mosca electorera (otra filtración exclusiva desde El Carmen)

Otro episodio de la vida que se vive en El Carmen. Madre e hija platican sobre lo que sucede en Nicaragua:

⁠— Camilita.

Y la mosca en el escritorio no se atreve a rascarse el hocico para no quebrar el silencio total que sigue al llamado sin respuesta.

⁠— Camila.

La mosca sigue petrificada y lista para volar lejos después de lo que es inevitable que siga.

⁠— ¡Camila Ortega Murillo Saavedra Zambrana! … ¡¡Camilaaaaaaaaaaaaa!! …. Ahhhhggggggg …. ¡puaf!

Y un escupitajo sale disparado y llevando consigo a la inocente mosca, la que en su huida fue a parar al interior de la boca que es la envidia de todos los odontólogos de Nicaragua.

⁠— ¿Qué pasa? …. ¡qué asco! …⁠

— ¿Asco? … ¡una mosca en mi boca por tener que gritar tanto para que respondas! … ¡ingrata!, bien sabes que cualquiera daría lo que fuera por ser mi asistenta …

⁠— Ya mama, ya … perdona, perdona … Andaba con lo de “disnieplos” …

⁠— ¿“disnieplos”? … ¿y qué es eso que te hace levantarte de tu silla sin mi permiso? … ¿un matamoscas?

⁠— Mama, mama … es un asunto de mi papa, dice que “nefli” solo cosas violentas está poniendo y que el necesita algo más calmado y con princesas …

⁠— Ah, ya, ya … tienes que mejorar tu inglés Camilita, ni yo entendí lo del “plos” ese, pero me parece bien que tu padre se entretenga con princesitas en casa y no con brujas en la calle … ¿tenes a mano las preguntas que me dijiste? …

⁠— Claro que sí, no paran de llamar preguntando si hay respuestas ….

⁠— ¿Respuestas? … ¿Quién espera respuestas de mí? … siempre deja claro que lo que yo doy son órdenes.

La mosca logra al fin sacudir sus alas de nuevo y aprovecha para volar lo más lejos posible de la boca que casi se la traga.

⁠— Ok mama, la que quiere órdenes entonces es la maje de la Fiscalía.

⁠— Camila, Camila … Camilita, ¿qué lenguaje es ese?, ¿a quién vos has oído en esta casa referirse así de una persona? … y no me respondas, no es necesario …. ¿qué quiere la Ana Julia? …

⁠— Dice que ya tiene encerrada a la Cristiana por andar lavando ajeno, al Arturito por andar secando sus trapos al sol en “guachinton”, ¿qué hace con el Félix, Medardo, el otro Chamorro, el Miguelito Mora, la …? …

⁠— Ya, ya, yaaaaaaa … para un minuto, vamos por partes, que esto no es tan sencillo como eso de andar lavando ropa de “pakistán” … ¿el Félix?, que le deje bien claro que no vamos a permitir a un norteño como presidente, y lo de norteño no es porque haya dejado el ombligo tirado en Matagalpa, ¡para nada!, es por andar huyendo para el norte cuando el comal se le calienta … si eso no lo convence, que le diga que la banda presidencial le queda chinga y capaz le apriete tanto que no lo deje hablar a la velocidad que suele hacerlo … y si aun así sigue jodiendo con lo de ser presidente, que lo acuse de llevarle jabón a la Chamorro para su lavandería y de haber mandado también a asolear sus bóxeres a tu “guachinton” en el último viaje del tal Arturito, quien me tiene harta también…

⁠— Ok, me queda claro … y obvio que traducir eso en delitos es asunto de la Anita, que para algo fue “polisilla” y hoy la tienes en aire acondicionado … ¿y el Medardo?, ¿qué hace con él? …

⁠— Sencillo, que se deje de babosadas con querer quitarme mi finca y que vaya a atender las suyas antes que el “guanlling” encuentre los reales para partir en dos a Nicaragua, un buen pedazo para mí y lo que sobre para el donante de esperma que dicen que es tu padre… Y si eso no lo convence, que lo acuse de ser el que hace los jabones para que el Félix se los lleve a la Chamorro…

⁠— Te noto poco imaginativa … todo termina en la mentada Chamorro …

⁠— ¡Camila Ortega Murillo Saavedra Zambrana!, a la que noto muy imaginativa es a vos, ¿te pago para cuestionarme o para anotar mis órdenes? … ¡y la respuesta sobra! … ¿Qué sigue?

⁠— ¿Qué hace con el otro Chamorro?

⁠— ¡Jodido!, y después dicen que la buena a parir era yo, ¿de dónde salen tantos Chamorros? … ¡ni se te ocurra responder! … vamos con el enésimo Chamorro ese, será acusado de suministrarle al Medardo la materia prima para hacer los jabones que lleva el Félix para que Arturito “el crucificado” lave sus bóxeres donde la Chamorro antes de irlos a asolear ya sabes donde… ¿listo?…

⁠— No … ¿qué hago con el Miguelito Mora? …

⁠— “Hijuep…”, ¿es que no hay otra cosa que hacer que querer ser presidente? … ¿qué hago con este?, ¿qué hago? … ah ya, que diga que anduvo una vez entrevistando a la Chamorro en su lavandería, que se resbaló con un agua jabonosa que se había derramado, y que del “guasmazo” que se dio pues quedó con el delirio de ser presidente, y en este país es un delito muy peligroso andar con el delirio de ser presidente … ¡Lista y servida la niña! …

⁠— Hay más gente en la lista …

⁠— Esos déjalos para la próxima temporada, sino la gente se aburre y se busca otra serie …

⁠— Mama, ¿puedo hacerte una pregunta? …

La mosca, previendo lo que casi siempre pasaba en casos así, voló hacia la puerta de entrada para salir huyendo a tiempo.

⁠— ¿Ajá?, ¿qué queres saber? …

⁠— La verdad que es una sugerencia más bien … ¿No sería mejor que mi Papa fuera siempre a las elecciones en su casilla DOS y que vos corrieras por la oposición? ….

⁠— ¡Camila Ortega Murillo Saavedra Zambrana! … te has ganado medio día de vacaciones, ¡qué buena idea! …. Ya me imagino a tu padre por un lado en su campaña, yo en la mía, y el pueblo todo nervioso, comiendo uñas, indecisos, rogando por poder decidir sabiamente, no sabiendo que hacer ante tan difícil situación: Yo en la casilla UNO y el otro en su DOS, ¿te imaginas el suspenso cada vez que saliera una encuesta? … ¿tienes el teléfono de la Kitty?, me urge decirle que me inscriba ya …

⁠— Te lo debo … lo tenía anotado en un papelito, pero se me quedó en unos jeans que mandé a lavar donde la Chamorro y …

⁠— ¡Camila Ortega Saavedra! … ¡y olvídate del Murillo y el Zambrana! … ¿Cómo has podido hacer eso?, ¿No hay nadie más en este país que te pueda lavar tus trapos? …

⁠— ¡Ay mama!, pues sí, pero la verdad que nadie lava tan bien como esa gente …

⁠— ¡¡Camilaaaaaaaaaaaa!! …

Y Camila y la mosca salieron voladas antes que ambas fueras tragadas sin masticar.