Lo que más mueve a Daniel Ortega: pasarle la cuenta a Nicaragua

Lo que más mueve a Daniel Ortega: pasarle la cuenta a Nicaragua

¿Es coincidencia que en un mismo día los paramilitares de Daniel «El Masacrador de niños» Ortega le hayan dado veneno a dos rehenes políticos en la Modelo y que el MINSA siga cerrando farmacias a lo descocido por todo el país? Para un ojo no entrenado en las oscuras artes de la conspiración batracia, sí, es totalmente random todo esto. Pero para mi, que tengo un doctorado en cuechos de la Seguridad del Estado de los 80 (cuando matar gente no era crimen de lesa humanidad, si no mística revolucionaria) entonces no, no es coincidencia.

Las pruebas están ahí, si ponen chinitos los ojos

Mientras la asesina intelectual de Alvarito Conrado, la compañera Sonia «Qué es Salud?» Castro estaba pasándole la factura a todas esas farmacias que se atrevieron a escupirle la cara a Masacrín, cerrando el día del paro, otro doctor batracio en la Modelo le estaba dando racumín a los dos presos políticos de Masaya.

La información actualizada y corregida de La Prensa (los que no le pagan suscripción a los Chamorro por favor cierren los ojos, digan no a la Piratería):

Dos presos políticos recluidos en la La Modelo, se encuentran con problemas de salud después de haber ingerido unas pastillas que les dieron los médicos de la cárcel supuestamente para el dolor, denunciaron familiares.

Según una primera versión de la abogada Yonarqui Martínez los presos habían intentado suicidarse por el maltrato que reciben en la prisión, sin embargo, sus familiares negaron esa versión. Se hablaba además inicialmente de tres presos políticos intoxicados, pero, han sido solamente dos: José Luis Ortega Vallecillo, de 20 años, y Carlos Alberto Vanegas Gómez, de 30 años. Ambos de Masaya.

Anielka Ortega aseguró que su hermano José Luis Ortega no se intentó suicidar, sino que fue intoxicado con una pastilla que le dieron los médicos.

Los batracios que todavía se atreven a leer Bacanalnica van a brincar y decir «Mentira, croac, los compañeros medicos no le pasarían la factura a un preso que de todos modos torturan diario. Tu tesis carece de motivo creíble, croac».

Elemental mi querido Sapo, el motivo sí existe. La factura que le están pasando a estos dos rehenes, es la misma que a don Eddy Montes, por haberse defendido cuando los querían masacrar …

José Luis fue uno de los presos políticos que resultó herido en el ataque de los guardias del pasado 16 de mayo, cuando fue asesinado Eddy Montes a manos de un custodio. Según Ortega, los dos presos solicitaron el medicamento ya que presentaban dolor como secuela del ataque, pero esto les hizo sentirse mal y hasta convulsionar.

En la mente batracia, cuando un rehén, metido en una jaula, desarmado, trata de defenderse de los balazos de AK del guardia que lo «cuida», es una ofensa a la honra del gran líder Masacrín. Ergo, la pasada de cuenta.

Entonces todo está conectado

Me extraña prixito, ya deberías de saber que en Nicaragua todo lo malo que nos pasa está de una manera u otra conectado a la tufalera que expide El Carmen. Diario … (y aquí quiero ser claro, como dice el Parásito Navarro cada vez que destapa el manjol que él cariñosamente llama boca) .. DIARIO hay un promedio de 7 detenidos en Nicaragua por cometer el imperdonable delito de preferir vivir en Nicaragua libre y no en el reino batracio.

A Daniel Ortega le vale sorbete echarse en el saco la economía, la seguridad, la estabilidad, todo lo que necesita un país para existir. Él solo tiene una cosa en la mente: venganza. Lo que en Nicaragua se conoce como pasar la cuenta es su razón de ser, el motor que lo mantiene vivo.

Todos esos excarcelados, acuérdense de la factura, porque a Masacrín no se le va a olvidar …

Los excarcelados Edwin Juárez Aguirre y Edder Muñoz Centeno denunciaron ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) que sufren constante asedio y persecución por parte de la Policía Orteguista (PO) y temen volver a ser detenidos.

Por su parte, Edder Muñoz manifestó que la Policía Orteguista no solo lo asedia a él sino a toda su familia, quienes viven en Masaya. “Hacen citatoria a mi familia para que lleguen a la estación policial de Masaya y les hacen propuesta para que le den información de lo que hago yo”, afirmó Muñoz.

“Andan detrás de mí. La policía llega a mi casa en la madrugada, se mantienen ahí y si salgo a la venta o al mercado, lo señores de los CPC del barrio andan donde quiera que voy”, denunció Muñoz.

“Es otro tipo de cárcel la que estamos viviendo. Creo que ni excarcelado me siento porque estar dentro de mi casa y viendo que hay oficiales afuera esperando a que yo salga y temer por mi vida, es el mismo sentimiento que sentía cuando estaba en el Chipote o La Modelo”, lamentó.

Y esos que están-, digo, estamos mordiendo el leño afuera, queriendo volver a Nicaragua, recuerden también:

El nicaragüense Diómedes Reyes Hernández huyó de Nicaragua el año pasado. Lo hizo por el constante asedio y amenazas de fanáticos orteguistas tras la jornada de protestas en contra del régimen orteguista en Nicaragua. Se exilió en Costa Rica, pero este año decidió regresar al país porque creyó en el programa de “retorno seguro” de los exiliados propuesto por el régimen de Daniel Ortega y ahora está desaparecido.

El 27 de mayo, Diomedes fue secuestrado por parapoliciales en Quilalí, Nueva Segovia. Desde entonces su familia no tiene información de su paradero. “Si un gobierno dice, vamos a darle libertad a alguien para que trabaje tranquilo, así lo cree uno, porque es la máxima autoridad del país. Y más si uno no ha cometido delito. Él confiadamente se vino”, dijo este martes Elías Reyes Moreno, tío de Diomedes Reyes.

No se equivoquen, la factura está guardadita, esperándonos a que pongamos un pie en Nicaragua.