¿Queres hacerle bullying a la Policía Sandinista? Pues te tengo el video perfecto

¿Queres hacerle bullying a la Policía Sandinista? Pues te tengo el video perfecto

Estamos en Bacanalnica y hoy es lunes. ¿Qué pasó? Los que leen este prestigioso blog informativo saben que los lunes son sagrados para nosotros. Para no ir contra natura, los lunes no se trabaja. Solo hay dos excepciones a esa reivindicación laboral: que pase algo muy importante en el país (y los cuatro lectores necesiten su respectivo resumen ejecutivo), o que alguien haga todo el trabajo de producción de contenido y me lo deje listo solo para el copy&paste.

Esto último fue lo que pasó hoy. El primo Miguel Mendoza me compartió hace un rato un video que me hizo brincar de la hamaca y venir a pecar.

Hagamosle bullying a la Policía Sandinista

Tengo una buena noticia para los boludos que no les gusta leer y una mala para los palmados que solo pueden videos cuando quintuplican. En vez de escribir mil palabras que no dan risa (si dan, pero vos sabes, la modestia), hoy vamos a dejarles un video de una hora, publicado hace una semana y que se llama «Espías del amor». Para ser más exactos, es un episodio de una serie producida por Chilevisión, un canal de Chile (sí, el país).

Vos dirás ¿Qué tiene de especial el video? ¿Salen paramilitares de Daniel Ortega matando chilenos? No niño, es un programa para agarrar a los morbosos mentirosos que engañan a los ilusos de Internet. Tipo cuando esa chavala que se parece mucho a Ana de Armas te acepta rápido la solicitud de amistad en Facebook.

En este episodio la engañada es una señora de 60 años que vive en Chile, y el engañador es un Policía Sandinista que se hace pasar por el medico de cabecera de Daniel «El Masacrador de niños» Ortega. Ustedes saben que aquí no condonamos el bullying, pero se trata de un policía batracio, que por ordenes de Masacrín es capaz de matar a cualquiera que cante el himno de Nicaragua.

El video lleva un poco más de 100 mil vistas, así que echemosle segunda para que llegue a las 500 mil. Ya que no podemos llevar a don Fanor a juicio por asesino (o por cómplice de asesinatos), pues hagamos que su cara sea famosa en toda Nicaragua.

Espías del Amor - Quiero a mi doctor de Nicaragua

No puedo negarlo, algo dentro de mi disfrutó demasiado la humillación. Sobre todo porque dice que trabaja con jóvenes. ¿Cuántos universitarios habrá «trabajado» este picaflor?

¡No sabe de lo que se salvó doñita!