¿A qué se van a dedicar los abogados en Nicaragua, ahora que ya no hay leyes?

¿A qué se van a dedicar los abogados en Nicaragua, ahora que ya no hay leyes?

Es famosa en Nicaragua la historia de los pobres pilotos que fueron a Rusia a entrenarse para volar aviones MIGs y que luego tuvieron que dedicarse a «emprender» en negocios varios. Porque como siempre, los rusos vieron a Daniel «El Masacrador de niños» Ortega con la insignificancia que tiene un libro en las oficinas de UNEN. En otras palabras, los MIGs nunca vinieron y como cuenta La Prensa:

Por eso a Arosteguí le tocó vender pescado. Por eso Marcos Salas tuvo que salir del país y trabajar como contratista. Por eso Calixto Baca vendió carros usados por un tiempo.

Del cielo a la tierra, La Prensa (25/03/2012)

Lo menciono, no para recordarles que Daniel Ortega es un gran arrastrado curtido cuando se trata de Rusia (aunque aquellos ni lo determinen), si no más bien para probarles que cuando se trata de pupusearse en la vida de las personas, los Sandinistas son campeones.

Al igual que aviones MIG, en Nicaragua no hay leyes

Una de las consecuencias inmediatas de la destrucción de las leyes y la justicia en Nicaragua, es que los abogados se quedaron en el aíre. Ya antes hemos hablado (varias veces) de cómo este fenómeno afecta a todos los nicaragüenses. Payo Solís, autor intelectual y material de esta hazaña, lo denunció muy vehementemente, una vez llegó a Costa Rica huyendo de su propio monstruo. Él, mejor que nadie, sabe que en Nicaragua, ser abogado, juez o simple ciudadano, no hace ninguna diferencia ante la justicia batracia. Ahí sí que es ciega, es lo que el Patrón (Daniel Ortega) diga.

Por eso es que ver a los empleados de Masacrín, repartir años como que fueran limones de ipegüe en el Mayoreo, no da ni frio, ni calor.

Cinco, ocho, diez años están recetando los jueces batracios a los presos políticos y nadie se inmuta, porque sabemos que eso no significa nada. Así como los 200 años que le dieron a don Medardo Mairena la primera vez que estuvo secuestrado, no significó nada. Salió, cuando a Daniel Ortega le roncó la gana. Esa es la verdadera respuesta a la pregunta «¿Cuándo saldrán los presos políticos?».

Los abogados son los nuevos pilotos de MIG

Por eso es que los abogados de hoy en día, son como los pilotos de MIG en los 80 y 90. Y no estoy hablando solo de los abogados de los presos políticos (todos se han tenido que exiliar y uno que otro terminó preso con su cliente). Estoy hablando de todos los abogados de Nicaragua, nuevos, viejos, famosos y no famosos. Yo mismo soy abogado, y sé exactamente que nada de lo que estudié tiene valor en Nicaragua. Cero.

Así que si vos estás leyendo esto, mientras estás cursando la carrera, mi recomendación es que mañana mismo busques otro oficio. El derecho, o mejor dicho los derechos, ya valieron sorbete en Nicaragua.

El cuerpo de benito

Para ilustrar mejor mi punto (y así convencerte de quemar todos esos libros que tienen más de 100 años alimentando cucarachas), el fin de semana le pedí a unos colegas que sí se toman muy en serio la ciencia jurídica, me mandaran una lista somera de las leyes que se están violando con los juicios de los presos políticos. Uno, que tiene más diplomas que todos los majes de UNEN juntos, me mandó tres categorías de violaciones a la ley:

Aspectos procesales

  1. Vulneración del debido proceso, por afectarse distintas garantías constitucionales.
    • Derecho a la defensa (incluso aunque se les hayan asignado defensas de oficio).
    • Licitud de la prueba (allanamientos ilegales, sustracción de objetos sin orden judicial).
    • Tutela judicial efectiva.
    • Plazo máximo de duración del proceso judicial.

Aspectos sustantivos

  1. Vulneración del principio de legalidad (atipicidad de las conductas, incumplimiento de los requisitos de la conspiración, ya que en algunos procesos hay un solo acusado, mientras que la conspiración se caracteriza por la intervención pluripersonal de varias personas).
  2. Actuación de los acusados en el ejercicio legítimo de un derecho (de reunión, opinión, libre expresión, etc.).

Aspectos penitenciarios

  1. Torturas.
  2. Incumplimiento régimen de visitas con garantías.
  3. Derecho a la defensa (comunicación privada con su abogado defensor de confianza).
  4. Derecho a la defensa por amenazas de detección a abogados de reos políticos.
  5. Denegación de asistencia sanitaria.

Cada uno de estos «detallitos» es suficiente para que en un país normal, un abogado medianamente competente, mande a la porra cualquiera de los juicios. Pero no en Nicaragua, mientras siga bajo ocupación militar del Reino Batracio.

Es más fácil buscar las leyes que no han sido violadas

Otro colega que practica el derecho penal en Nicaragua, me respondió los siguiente:

«La lista sería interminable, de ahí que resulta más fácil ir a revisar los principios del proceso penal a partir de los cuales se definan otras normas. Todos o casi todos (porque tengo duda con el Principio de juez natural) han sido violados.»

Acto seguido me mandó una sábana de artículos de procesal penal que por supuesto no entendí (así que no los voy a repetir), solo para concluir lo mismo que él afirmó al inicio, «todos los derechos han sido violados».

Me dijo también:

«Mirá, en estos procesos la Policía, el Ministerio Público y los jueces les vale madre la letra que define el tipo penal, ellos dan por perfeccionado el delito con el nombre que el legislador le asignó (nomen iuris). Resulta pues que cuando uno hace el análisis (sin mayor esfuerzo) del tipo penal, descoloriéndolo por dentro y por fuera, solo hay una conclusión: no hay delito, hay atipicidad.»

De eso sí me acuerdo un poco, cuando se trata de derecho penal, lo que no está expresamente prohibido, no es delito. El delito es el «tipo» y si los actos de la persona no encaja en ese tipo, no hay de piña. Hagan de cuenta que están viendo una pieza de rompecabezas que tiene que encajar perfecto, o no vale.

Me convenciste, voy a buscar un oficio mejor

El punto de la nota de hoy no es hacer las de Cristóbal Colón, que «descubrió» una tierra donde ya vivíamos varios miles de personas (sin saber que estábamos cubiertos). Más bien quiero concientizar a todos esos colegas que están perdiendo su tiempo aprendiendo leyes que nunca van a usar, a que busquen un oficio que no dependa de los caprichos de Masacrín. Aprovechen que están a tiempo. Que no sea medicina sí, porque a como hemos aprendido con la crisis del COVID, ahí también impera el roncamiento del patrón.

Los que ya sacaron el diploma, no se preocupen. Más adelante, cuando Nicaragua se libre y vuelva a ser una república, vamos a requerir de ustedes para deshacer… o mejor dicho, rehacer, todo lo que Payo Solis deshizo. Mientras tanto, dicen que los pollos asados se venden balazo.